Suplementación como factor determinante en la calidad de vida.

viernes 1, febrero, 2008

Por G. F. Bougain.

Definiendo «Suplementos Nutricionales».

Un suplemento es, por definición, algo que acompaña otra cosa esencial, aunque en algunos casos los suplementos pueden por sí mismos ser una parte esencial de un régimen de nutrición saludable.
La FDA (Food And Drug Administration, Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos) define los suplementos nutricionales como «productos consumidos de manera oral para suplementar una dieta saludable».
Según esta definición, el objetivo principal de la suplementación es proveer nutrientes para completar una dieta saludable. Sin embargo, los suplementos nutricionales no la reemplazan, y ésta sigue siendo la mejor manera de prevenir riesgos de enfermedades y de proveer los nutrientes esenciales.
No obstante, no debe confundirse a la utilización de suplementos con dopaje o dóping. Dentro de las sustancias que aumentan el rendimiento físico se encuentran dos categorías: las que lo aumentan sin riesgos para la salud, y las que lo hacen en detrimento de la salud del individuo que las consume. En la primera categoría se ubica a la suplementación y en la segunda al dóping. Los efectos colaterales de estos últimos pueden resultar en serias alteraciones del metabolismo o aún en muerte. A manera de ejemplo, la suplementación basada en hormonas sintéticas (anabolizantes esteroides) o capaz de afectar el sistema nervioso central, está prohibida.
Sin embargo hay una tercera categoría en la que ubicamos a las sustancias que sólo en determinadas cantidades aumentan el rendimiento físico con perjuicio para la salud, como la cafeína.
El Comité Olímpico Internacional y los organismos responsables de los deportes de cada país son los encargados de regular las normativas con las que se decide en qué categoría se ubican las distintas sustancias.

Suplementos Nutricionales es un término amplio para un rango de productos que incluye:
– aminoácidos.
– enzimas.
– suplementos herbales.
– suplementos metabólicos.
– suplementos minerales.
– suplementos vitamínicos.
Se expenden bajo distintas formas dependiendo de los ingredientes y la naturaleza de los suplementos. Pueden ser presentados en cápsulas, concentrados, barras, extractos, líquidos, polvos, gel y tabletas.

Razones de su uso masivo.

Los suplementos nutricionales son cada vez más populares para llevar una vida saludable. Motivada por un aumento en el interés por el cuidado de la salud personal, la nutrición y la dieta, la venta de los suplementos facturan sólo en los Estados Unidos más de 56 billones de dólares anuales.
La población en la mayoría de los países industrializados está envejeciendo. Con este envejecimiento, los individuos focalizan cada vez más en una nutrición saludable y en la prevención de enfermedades. Estos individuos ven a los suplementos como una manera tan conveniente como efectiva para mantenerse saludables y para mantener bajos los costos médicos.
Otros individuos usan los suplementos porque consideran que sus dietas son inadecuadas. En la cultura actual, de ritmo vertiginoso, los alimentos empaquetados y la comida altamente procesada (fast food) usualmente dominan las dietas y no proveen los nutrientes suficientes. Los suplementos ayudan a llenar estos «huecos» nutricionales.
También existen razones médicas para su utilización:
– en mujeres embarazadas, un aporte adicional de ácido fólico es necesario aún en un régimen de nutrición saludable.
– el stress proveniente de las tareas diarias o de la práctica de deportes reduce los niveles de concentración de nutrientes que deberían estar presentes en el organismo.
Balancear la dieta es de vital importancia para la salud, pero el hecho de hacerlo realidad es muchas veces complicado. Los alimentos producidos en masa son generalmente
altamente procesados, perdiéndose nutrientes esenciales en el procesamiento. Las modernas técnicas agrícolas para generar el mejor producto posible puede significar que aún los alimentos frescos pueden no contener todas las vitaminas y minerales que deberían. Agreguémosle a esto el tiempo requerido para preparar los alimentos: puede ser un contratiempo obtener los nutrientes que el organismo necesita.
Esto no significa, por supuesto, que se debe descartar la idea de alimentarnos bien. Aún con los desafíos mencionados, una dieta balanceada sigue siendo la mejor manera de mantenerse saludable con un peso y una composición corporal apropiados. Los suplementos nutricionales no reeplazarán una dieta balanceada, pero la complementará con las vitaminas y los minerales que la dieta no provea.

Usos de los suplementos nutricionales.

La suplementación tiene una serie de usos en la búsqueda de la calidad de vida a través de una nutrición saludable:
– provee nutrientes faltantes en las dietas.
– provee nutrientes extra en períodos de extrema necesidad como el embarazo o picos de stress.
– mejora el rendimiento físico.
– ayuda a aumentar la masa muscular.
– ayudaa acelarar la pérdida de tejido adiposo.
– contribuye con los programas de salud preventivos.

Efectos de la suplementación en la salud.

Existen muchas evidencias que indican que algunos suplementos podrían reducir la probabilidad de la aparición de la osteoporosis, algunos desórdenes en la visión, enfermedades cardíacas y aún algunos tipos de cáncer. A medida que las investigaciones científicas continúen examinando y definiendo el rol que los nutrientes y la dieta balanceada juegan en la salud de los individuos, la importancia de la suplementación se incrementará.
De todas formas, antes de comenzar con una nueva dieta y un régimen de suplementación, es necesaria la entrevista con el profesional del cuidado de la salud.

Efectos colaterales en la salud.

La mayoría de los suplementos nutricionales tiene casi nulos efectos colaterales y pueden ser tomados libremente, pero deben ser tratados con la misma precaución que los medicamentos convencionales. El uso de suplementos para tratar algunas dolencias tiene ciertamente alguna validez, pero nunca deben ser usados para tratar condiciones de salud de seriedad.

Los suplementos y la medicina alternativa.

No es posible afirmar que con los suplementos podemos tratar o curar problemas de salud, pero ciertas condiciones parecen responder de manera positiva a suplementos, incluyendo alergias, insomnio, fatiga, problemas digestivos y problemas respiratorios. La efectividad de los suplementos como tratamientos de salud varían con cada individuo y las investigaciones científicas todavía no han logrado verificar sus cualidades medicinales.

Control de los suplementos nutricionales.

En los Estados Unidos, la fabricación de los suplementos nutricionales y dietéticos están bajo un distinto control por parte de la FDA que los alimentos y los medicamentos. Con la promulgación de la legislación acerca de la suplementación, en 1994, se decidió que los fabricantes de suplementos nutricionales son legalmente responsables de la seguridad de los suplementos antes de su llegada al mercado, por lo que no es necesaria la aprobación de la FDA para su marketing. Los fabricantes son también reaponsables de que las etiquetas reflejen realmente lo que el producto contiene. Si la empresa manufacturera provee información errónea o expende un producto que no es seguro, la FDA es la reponsable de tomar medidas contra ella.

Los suplementos y su relación con los medicamentos convencionales.

Los suplementos nutricionales pueden interactuar con los medicamentos. Muchos suplementos nutricionales se expenden como completamente naturales. Se tiende a pensar que «natural» es lo mismo que «seguro», en especial cuando la nutrición, la dieta y la salud están involucradas. Este puede ser un peligroso malentendido, especialmente al considerar las dosis y las interacciones con productos farmacéuticos.
Si bien la suplementación puede ejercer efectos poderosos sobre la salud, actúa más lentamente que los medicamentos. Estos efectos no siempre son positivos: algunas veces los suplementos incluyen ingredientes que siendo esenciales para una dieta saludable, pueden ser tóxicos si son consumidos en grandes dosis.


Anabolizantes esteroides: su abuso.

jueves 24, enero, 2008

Artículo publicado en el website del National Institute on Drug Abuse.

Una de las principales razones dadas como causa del abuso de los esteroides es para mejorar el rendimiento en los deportes.
De acuerdo con algunas encuestas, se calcula que el abuso de esteroides entre los atletas es menos del 6 por ciento, pero la  información proveniente de anécdotas sugiere que el abuso está más extendido. Aunque ya están usándose procedimientos que detectan el uso de esteroides para así desalentar su abuso entre atletas profesionales y olímpicos, constantemente aparecen nuevas drogas de diseño que pasan sin detectarse y que colocan a los atletas dispuestos a hacer trampa un paso más allá de los esfuerzos de detección. Sin embargo, esta dinámica puede estar por cambiar si el proceso de guardar muestras de orina y de sangre para volver a hacerles pruebas en una fecha futura se hace la norma. La alta probabilidad de eventualmente poder detectar los nuevos esteroides de diseño, una vez que exista la tecnología, además del miedo de sanciones retroactivas, le debe dar a los atletas motivo para detenerse a pensar antes de usar estas drogas. Otra razón dada para tomar esteroides es para aumentar la musculatura o reducir la grasa corporal. Este grupo incluye a algunas personas que padecen de un síndrome de conducta llamado dismorfia muscular en el que la persona tiene una imagen
distorsionada de su cuerpo.
Los hombres con esta condición se creen que lucen pequeños y débiles, aún cuando son grandes y musculosos. De igual manera, las mujeres con este síndrome creen que parecen excedidas y fláccidas, aunque en realidad sean delgadas y musculosas. Algunas personas que abusan de los esteroides para aumentar su musculatura han sufrido abuso físico o sexual. En una serie de entrevistas con levantadores de pesas del sexo masculino, un 25 por ciento de aquellos que abusaban de esteroides informaron que conservaban recuerdos de abuso físico o sexual en su infancia. De igual manera, entre las levantadoras de pesas del sexo femenino que habían sido violadas, se reportó el doble de uso de esteroides anabólicos u otra droga que supone logra el crecimiento muscular, en comparación con las levantadoras de peso que nunca habían sido violadas. Además, casi todas las que habían sido violadas informaron que habían aumentado marcadamente sus actividades fisicoculturistas después del ataque. Ellas opinaban que siendo más corpulentas y fuertes desalentarían nuevos ataques porque los hombres las encontrarían intimidantes o poco atractivas.
Finalmente, algunos adolescentes abusan de los esteroides como parte de un patrón de comportamiento de alto riesgo. Estos adolescentes también corren otros riesgos como conducir cuando han bebido alcohol, portar armas, no ponerse un casco cuando salen en moto y abusar de otras drogas ilícitas. Los trastornos como la dismorfia muscular o un historial de abuso físico o sexual, o de conductas de alto riesgo han sido asociados con un mayor riesgo de iniciar o continuar con el abuso de los esteroides.

Cómo se produce el abuso de los anabólizantes esteroides?

Algunos esteroides se toman oralmente, otros se inyectan intramuscularmente, y otros vienen en ungüentos (gels) o cremas que se frotan en la piel. Las dosis utilizadas por los abusadores pueden ser entre 10 y 100 veces mayores a las dosis utilizadas para afecciones médicas.

Uso «cíclico», en «montones» y en «pirámides».

Los esteroides a menudo se abusan siguiendo patrones llamados «ciclos», que significa que los usuarios toman dosis múltiples de esteroides a lo largo de un período específico de tiempo, dejan de tomarlos por un período y después vuelven a comenzar. Los usuarios a menudo también mezclan varios diferentes tipos de esteroides en un proceso llamado «amontonamiento». Al «amontonar» las drogas, lo que típicamente hacen los abusadores de esteroides es tomar dos o más esteroides anabólicos diferentes, mezclando los orales y/o los inyectables, y algunas veces incluyen compuestos diseñados para uso veterinario. Los abusadores piensan que los diferentes esteroides interactúan para producir un efecto mayor en la musculatura del que se lograría si cada droga fuese tomada por separado, una teoría que no ha sido científicamente comprobada. Otra manera de abusar de los esteroides es tomándolos en forma de «pirámide». En este proceso, los usuarios lentamente incrementan el abuso de los esteroides (aumentando el número de esteroides que toman o la dosis y la frecuencia de uno o más esteroides usados juntos), llegando a un punto máximo alrededor de la mitad del ciclo y de ahí gradualmente disminuyendo la dosis hasta llegar al final del ciclo. A menudo los usuarios toman las dosis en forma de pirámide en ciclos de 6 a 12 semanas. Al principio del ciclo, comienzan con dosis bajas de las drogas «amontonadas» y poco a poco van aumentando la dosis. En la segunda mitad del ciclo, las dosis se reducen gradualmente hasta llegar a cero. A veces continúan con un segundo ciclo en el cual siguen entrenándose pero sin usar drogas. Los abusadores creen que al tomar las drogas en forma de pirámide le dan al cuerpo tiempo suficiente para adaptarse a las dosis más altas y que el ciclo sin drogas permite la recuperación del sistema hormonal. Al igual que con el «amontonamiento», los beneficios percibidos de las pirámides y de los ciclos no tienen respaldo científico.


Hormonas anabólicas y entrenamiento.

miércoles 23, enero, 2008

Por Horacio Anselmi.

El entrenamiento físico genera un desequilibrio químico que debe ser compensado por el organismo del atleta. Las hormonas juegan un papel muy importante en esa compensación. Las hormonas son compuestos químicos segregados al torrente sanguíneo por glándulas de secreción interna, en concentraciones mínimas. Actúan en células distantes al lugar de origen y allí se unen a receptores, produciendo una respuesta biológica.
Así, llevadas por la sangre, desempeñarán un importante papel dentro del metabolismo energético, ayudarán a mantener el equilibrio interno y tendrán un actividad intensa en la biosíntesis.
Describiremos una a una a las hormonas que juegan un papel de relevancia en el entrenamiento y en la recuperación de los deportistas.

Testosterona.

La testosterona es una hormona sexual de primer orden. Es la encargada de aportar los caracteres sexuales masculinos.
Mayoritariamente es sintetizada a partir del colesterol por las células de Leydig de los testículos, y en mucha menor proporción por los ovarios femeninos.
El 97% de la testosterona viaja por la sangre unida a proteínas. En la próstata y en otros tejidos especializados la testosterona se convierte en su variedad fisiológicamente activa la dihidrotestosterona.
Los aumentos en la secreción endócrina de testosterona están regulados por el eje hipotálamo-hipofisiario-testicular a través de sus hormonas Gnrh – FSH.
La Testosterona tiene un papel fundamental como agente de metabolización proteica. Es la responsable del crecimiento muscular y de la recuperación plástica post-entrenamiento.

Cuando realizamos entrenamientos con sobrecarga, estamos buscando fundamentalmente resultados sobre nuestra masa muscular.
Para obtener resultados óptimos sobre nuestra masa muscular, debemos asegurarnos que la concentración de la testosterona en sangre sea alta.
Para que esto suceda, procuraremos que la intensidad del entrenamiento sea alta, es decir por encima del 85%.
Diversas experiencias han demostrado aquello que los entrenadores búlgaros planteaban en la década del ’80: que los entrenamientos de alta intensidad aumentan la concentración plasmática de testosterona.

Observemos la línea de tiempo de un entrenamiento diario típico: durante los primeros minutos después de iniciado un entrenamiento de sobrecarga de alta intesidad, la concentración de testosterona en sangre comienza a aumentar hasta alcanzar un pico máximo entre los 30 y 40 minutos luego de comenzado el trabajo; luego comienza a descender hasta alcanzar valores desfavorables para el entrenamiento después de 90 minutos, transformando este entrenamiento en inútil. La fatiga nerviosa confirma este planteo: resulta muy difícil mantener una intensidad considerable después de los 90 minutos.
En el alto rendimiento deportivo, surge un problema: el trabajo diario excede normalmente los 90 minutos. La solución sería efectuar un descanso de entre 40 y 50 minutos luego de realizada la primera sesión, lo que recompondrá los valores de concentración de testosterona en sangre. Luego de este descanso, el atleta estaría en condiciones de realizar una nueva sesión de entrenamiento.
Este proceso se reiterará de la misma forma en una tercera oportunidad, siendo para cada vez, la concentración un poco más alta que la anterior.

Las recomendaciones para encarar cada entrenamiento son:
– Los entrenamientos deben ser cortos e intensos. Deben ser ejecutados en un lapso de 90 minutos a intensidades superiores al 85%.
– Los entrenamientos con sobrecarga son inútiles si se extienden más allá de estos 90 minutos.
– Los ejercicios elegidos deben ser poliarticulares y preferentemente dinámicos, es decir que puedan ejecutarse a máxima velocidad y máxima tensión muscular.
– El primer ejercicio del plan, debe ser dinámico e integrador, para que active la mayor cantidad posible de unidades
motoras y propicie el aumento de la concentración hormonal.
– El segundo y tercer ejercicio serán aquellos que consideramos fundamentales para la sesión de entrenamiento.
– los ejercicios que ocupan la parte final del entrenamiento, serán preferentemente aquellos que necesitan un esfuerzo neurológico de menor intensidad, por hallarse fatigado el sistema nervioso. De esta manera , se entrenará la musculatura de sostén.
– Los niveles más altos de concentración de testosterona en sangre se alcanzan por la mañana, por lo que se recomiendan los entrenamientos matinales para el desarrollo de la fuerza y la potencia.

Eje testosterona – cortisol.

El cortisol es una hormona catabólica, que se contrapone a la acción anabolizante de la testosterona.
Hakkinen en 1985, demostró que existe una alta correspondencia entre los valores del eje testosterona – cortisol y los resultados en el entrenamiento de la fuerza.
Si nos basamos en el ritmo circadiano bastante similar de ambas hormonas, López y Manso en 1991, encontraron los mejores valores en horas de la tarde.
Con lo que aparece una nueva opinión valida si lo único que hacemos en el día es entrenamiento con sobrecarga.
En los entrenamientos mixtos, los esfuerzos de volumen alto tienden a aumentar la concentración de cortisol en desmedro de la testosterona.
En resumen, cuando los entrenamientos son mixtos, el entrenamiento con sobrecarga debe efectuarse en primer término.
Si nos proponemos organizar las tres sesiones diarias de entrenamiento de un equipo de basquetbol, en la primera realizaremos el entrenamiento con sobrecarga e inmediatamente después realizaremos el entrenamiento específico de básquetbol. De esta forma el primer entrenamiento servirá como entrada en calor y activador neurológico para el segundo. Esta organización conseguirá también una transferencia del entrenamiento de sobrecarga a los movimientos específicos del deporte.
En la tercera sesión haremos el trabajo de Preparación Física de campo, que seguramente tendrá un mayor componente aeróbico, con lo que fisiológicamente mejoraremos notoriamente la efectividad general del entrenamiento.

Insulina.

La insulina es una hormona aminoacídica segregada por el páncreas, con importantísimas funciones en cuanto a la regulación del metabolismo de los carbohidratos, las proteínas y las grasas. Es una hormona de transporte que tiene un papel de gran importancia en la recuperación post-entrenamiento.
Sus funciones son: aumentar el transporte de glucosa a las células, posibilitando su recuperación; aumentar el transporte de aminoácidos y favorecer la síntesis proteica; aumentar la síntesis de ácidos grasos y disminuir la lipólisis, por lo que el control de la insulina se vuelve fundamental en ciertos procesos de pérdida de adiposidad.
La glucosa y ciertos aminoácidos como la arginina y la leucina estimulan la concentración de insulina en sangre.
El ejercicio, al reducir las concentraciones de glucosa en sangre actúa como un inhibidor de los niveles de insulina.
Un corto tiempo después de finalizado el trabajo, cuando nos encontramos en reposo, la concentración de insulina aumenta recuperando sus niveles normales.
La insulina permite la incorporación de los agentes de recuperación desde la sangre hasta la fibra muscular.
Es de vital importancia que luego de finalizado el entrenamiento con sobrecarga, existan en sangre cantidades suficientes de aminoácidos para que pueda producirse la recuperación plástica del desgaste producido.
Por lo tanto se recomienda la ingestión de proteínas o aminoácidos inmediatamente después de finalizado el entrenamiento para asegurar la reconstitución del tejido muscular.
Estos aminoácidos se suelen consumir acompañados de glucosa, para asegurar el aumento de la insulina y las posibilidades de transporte.
Si antes del entrenamiento consumimos alguna fruta, la fructosa tardará un tiempo en reconvertirse a glucosa, aumentando entonces la concentración de insulina posterior.

Somatotrofina.

La somatotrofina (STH) es un polipéptido de 191 aminoácidos. Su acción es regulada por el hipotálamo mediante la emisión de hormonas estimuladoras GHRH. o inhibidoras SHRH.
En el ámbito celular es una hormona anabólica en lo que respecta al transporte de aminoácidos y a la síntesis de proteínas.
En el tejido adiposo aumenta la lipólisis. La secreción de STH está controlada por el hipotálamo.
En lo que a entrenamiento se refiere nos interesa su función de acelerar el metabolismo, acentuando los procesos de recuperación.
La concentración de STH, aumenta con el entrenamiento intenso y parece responder también a la acidificación del medio por la aparición de ácido láctico.
Hakkinen 1988 encontró valores en pesistas de entre 9 y 12 veces el valor original, los valores mas altos sin embargo se alcanzan 1 hora después de haber finalizado el entrenamiento.
Su concentración más alta la alcanza, por la noche, en la parte más profunda del sueño, (Fases III y IV) ocasión en la que el organismo realiza las funciones más importantes de recuperación orgánica.
El aumento de la temperatura corporal, también induce al aumento, lo que explica en parte el aumento notorio en la recuperación que proponen las sesiones de Sauna.
Es imprescindible para los atletas de rendimiento, dormir una adecuada cantidad de horas por la noche.
Los horarios de sueño deben mantenerse ya que las hormonas tienden a comportarse en forma cíclica y de cambiarlos es muy probable que no se produzca adecuadamente la recuperación.

Edad y concentración hormonal.

Hemos visto que el entrenamiento con sobrecarga es efectivo sólo si poseemos una concentración razonable de testosterona que permita la formación de masa muscular.
Estas condiciones se presentarán después de la pubertad.
La comprobación más sencilla que puede hacer un entrenador para determinar el momento preciso del aumento de la concentración hormonal, para comenzar a entrenar con sobrecarga, surge de una evaluación muy sencilla.
Uno de los primeros síntomas del despegue hormonal es el crecimiento violento de la longitud de las piernas.
Los entrenadores solemos tener registros del salto en largo sin impulso de los jóvenes con los que trabajamos.
Si de un día para el otro, este registro aumenta considerablemente, sabemos que al día siguiente debemos enviar a ese joven al gimnasio a comenzar sus entrenamientos con sobrecarga.
Tiempo atrás existía la disyuntiva, sobre el tiempo cronológico en el que se debía comenzar a entrenar la fuerza.
Algunos autores preferían esperar hasta los 17 años, que los niveles de concentración hormonal fueran máximos y que el proceso de maduración ósea estuviera más avanzado.
Otros, prefieren comenzar inmediatamente después de registrado el despegue hormonal. Nos asisten varios motivos. Los porcentajes de evolución comenzando antes, son incomparables 350 al 500% de mejoría, contra 150 –  250%, si comenzamos después de los 17 años.
El supuesto peligro de iniciar la sobrecarga cuando el sistema osteoarticular no se encuentra preparado, se resuelve con una perfecta técnica de ejecución y sobrecargas adecuadas a las posibilidades, sumado a un importante trabajo para desarrollar la musculatura de sostén.
Entrenar la sobrecarga en estas edades tempranas, es como apuntalar un arbolito, para que crezca derecho y saludable.

Ciclo menstrual y entrenamiento.

El ciclo menstrual es un sistema producido por acciones precisas del Sistema nervioso central, el ovario, la hipófisis y el sistema reproductor femenino.
Consta de dos grandes fases:
– La fase folicular, que da lugar a la ovulación. En ella la secreción de estradiol aumenta progresivamente hasta alcanzar un pico justo antes de la ovulación.
– La fase luteínica, que comienza con la ruptura del folículo y culmina con la próxima menstruación.
En esta fase se encuentran  niveles elevados de progesterona.
La asimilación de las cargas por parte de las atletas femeninas depende fundamentalmente de sus ciclos hormonales. Las diferentes fases de su ciclo menstrual determinaran su  capacidad de realizar más o menos entrenamiento.
Un manejo inadecuado de las cargas, puede provocar irregularidades en la menstruación y una pobre evolución de los resultados deportivos.
En un ciclo de 28 días las cargas se distribuirán de la siguiente manera: las cargas más altas del entrenamiento corresponderán a los periodos  pre y post – ovulatorio , siendo el primero el de mayor capacidad de absorción de carga.
La semana premenstrual es la más pobre en cuanto a asimilación de carga se refiere. Esto se debe a la presencia de una alta concentración de progesterona. Esta hormona es catabólica y perjudica notoriamente al entrenamiento.
Las mujeres toleran mucho menos la intensidad que los hombres, esto se debe fundamentalmente a que poseen una menor cantidad de testosterona, lo que les dificulta la formación de masa muscular.
Sin embargo están capacitadas para realizar volúmenes de trabajo algo superiores.
Algunos entrenadores aconsejan a sus deportistas realizarse exámenes de orina diarios durante 56 días. El objeto es poder graficar la evolución de las cantidades de hormona a lo largo de la actividad de los dos ovarios.
Se determinará específicamente las concentraciones mas altas de progesterona, para poder bajar la carga en esas circunstancias.